Los fuegos artificiales marcan la llegada del nuevo año en todo el mundo. Y es que, ya sea en la montaña o en la costa, en el interior o en la capital, dentro o fuera del país, ya sea en familia o con desconocidos, las posibilidades a la hora de dónde pasar la Nochevieja son muchas.
Pero, ¿qué te parece pasar los últimos momentos del 2024 y los primeros momentos del 2025 en la Presencia de Dios, el Único que puede dar la dirección correcta para superar todos los desafíos que se presentarán en los próximos 365 días? Esta es la propuesta para la Vigilia de Año Nuevo que se realiza en todas las Iglesias Universal la noche del 31 de diciembre al 1 de enero. En el encuentro, los participantes agradecen al Todopoderoso por haber llegado al final de otra etapa y piden sabiduría y fuerza para iniciar el nuevo ciclo.
La actitud de dedicar los primeros minutos del nuevo año a Dios es fundamental, pues demuestra nuestra dependencia de Él y nuestro reconocimiento de quién es Él. Aunque tengamos todas las habilidades necesarias para un año victorioso, entendemos que sin Dios no serán suficientes para el éxito de nuestro camino.
Un año diferente
Cuando una persona es considerada con Dios y le dedica los primeros minutos del nuevo año, hay una distinción en su vida. Esto es lo que sucede con quien participa de la Vigilia.
La gran diferencia es que ponemos todos nuestros propósitos y objetivos en las Manos de Dios y recibimos la fuerza que necesitamos para este nuevo camino, que nos da la certeza que todo sucederá según Su Voluntad. Esto se debe a que está escrito en Filipenses 4:13: ‘Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.
Entonces prográmese con anticipación: la Vigilia del cambio de año tendrá lugar en todas las Iglesias Universal, de norte a sur del país, el 31 de diciembre a las 22:30H le incitamos a participar en la Universal más próxima a usted: https://universal.org.uy/direcciones/