La vida cotidiana frenética de la humanidad ha llevado a muchos a preferir contenidos de corta duración, especialmente cuando se trata de entretenimiento en plataformas digitales como Instagram, TikTok y YouTube.
En 2023, por ejemplo, Google anunció que la plataforma YouTube Shorts superó la marca de 50 mil millones de visualizaciones diarias. A pesar de la importante cifra, Steve Chen, cofundador de YouTube, revela que no le gusta el concepto del recurso pues reconoce su daño al cerebro humano.
“Tengo dos hijos y les digo que no vean YouTube Shorts. Sigo creyendo que la gente debería ver vídeos de 2 a 5 minutos. Sin embargo, sé que yo también soy culpable, porque YouTube tiene un feed de vídeos relacionados. En otras palabras, incluso sin YouTube Shorts, nadie terminaría de ver un vídeo antes de hacer clic en otro. Este comportamiento adictivo no es saludable”, afirma el taiwanés en una rueda de prensa en el Foro Biban 2023.
Más números:
- Además de YouTube Shorts, los Reels de Instagram alcanzaron 140 mil millones de reproducciones diarias en 2022;
- Y TikTok superó la marca de mil millones de usuarios activos mensuales.
¿Por qué es perjudicial?
Un estudio realizado por un científico de la Universidad de Zhejiang, en China, señala que el contenido personalizado de corta duración enviado por el algoritmo de las redes sociales es responsable de la alta producción de dopamina, un neurotransmisor que provoca la sensación de placer y satisfacción. Y, para los expertos, cuanta más dopamina recibe el cerebro, más quiere, generando un círculo vicioso y ahí es donde radica el problema.
Además, dicho comportamiento puede impactar el desarrollo de actividades complejas, las relaciones sociales y la salud mental de sus usuarios.
Qué necesita saber:
Independientemente de la causa, cualquier exceso puede resultar en graves consecuencias para el desarrollo de los seres humanos, además de riesgos para su integridad y salud física. Por eso, intente siempre utilizar las plataformas y herramientas disponibles en internet de forma consciente y equilibrada, y si reconoces su uso nocivo no dudes en ser radical, evítalas.
En casos de actitudes compulsivas buscar ayuda médica. Además, si has sufrido las consecuencias de esta práctica o conoces a alguien que las haya sufrido, busca también apoyo espiritual, acude a una Iglesia Universal más cercana a ti y pide ayuda.
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