Los seres humanos pasan sus días tomando decisiones para cuidar lo que es importante para su cuerpo, su salud, su familia y su carrera, pero a menudo dejan de lado el cuidado de su interior. El problema es que esta negligencia genera varias pérdidas. Para empeorar las cosas, la avalancha de información disponible en estos días destruye la paz y enferma el alma de la mayoría de las personas.
La buena noticia es que la manera de encontrar el equilibrio y darle sentido a la vida es fortalecer la relación con Dios. El Ayuno de Daniel, que comenzó el 11 de julio y se extenderá hasta el 31 de este mes, es la oportunidad ideal para ello. La propuesta es que, durante estos 21 días, los participantes cuiden su interior y se preparen para recibir el Espíritu Santo.
Prioridad
Con el tiempo, el exceso de información absorbida por una persona a diario puede generar ansiedad, preocupación y pérdida de la paz y el equilibrio en las relaciones personales y profesionales. Para evitar estos problemas, los participantes en el Ayuno de Daniel deben priorizar el propósito durante todo el período en que ocurre.
Según el Obispo Edir Macedo, cada persona que desee participar del Ayuno de Daniel necesita evaluar cómo está su corazón, porque quien entra en este propósito queriendo satisfacer sus propios caprichos, vanidades, anhelos y deseos no experimentará ningún cambio. “Dios quiere descender sobre su corazón. Aunque u corazón esté lleno de pecado, entrégalo en el Altar, porque entonces Dios bajará y te transformará para que puedas santificarlo aquí en la Tierra”, afirma.
Un camino
El viaje de 21 días en el Ayuno de Daniel es la preparación para dar la vida en el Altar, pero ¿qué significa eso? el Obispo Macedo responde: “no se trata de dar una ofrenda o colocar tus tesoros, sino de poner en el Altar lo más difícil, que no es lo físico ni lo material, sino tu corazón, tus sueños, tus anhelos y tu codicia. Es la entrega total de ti mismo en el Altar, permitiendo así que el Espíritu Santo reine dentro de ti y gobierne tu vida y tu corazón. Tu corazón no puede tener dos gobernantes, dos amos: o lo gobiernas tú o lo hace el Espíritu Santo. Si Jesús es tu Señor, tu corazón es guiado por Él. Una vez que tienes la dirección del Espíritu Santo, tienes paz, no te pones ansioso, nervioso o preocupado”, dice.
Diez consejos para tener éxito en el Ayuno de Daniel
- 1 Deja la información secular a un lado, a menos que trabajes con información o necesites estudiar. Si es necesario, consume este tipo de contenido con moderación.
- 2 Evite ver juegos y producciones de entretenimiento, ya que generarán distracciones innecesarias
- 3 Dedica más tiempo a la lectura de la Biblia, preferiblemente por la mañana, antes de iniciar cualquier actividad
- 4 Acceda a contenidos que contribuyan a fortalecer su fe, como los disponibles en el portal Universal.org.uy, El Universal, Red Aleluya Uruguay y los blogs del Obispo Edir Macedo, Ob Julio Freitas y Godllywood Sudamérica donde todos los días a las 17H habrá una live.
- 5 Evite perder el tiempo en sitios de compras y redes sociales
- 6 Dedícate a ir más seguido a la iglesia, ya que esto te ayudará a fortalecer aún más tu comunión con Dios
- 7 Haz propósitos de oración y ayuno enfocados en buscar el Espíritu Santo o renovar tu fe
- 8 Abstente de series y películas seculares e invierte tu tiempo libre en producciones basadas en la Palabra de Dios. La plataforma Univer Vídeo tiene opciones para toda la familia
- 9 Consuma libros relacionados con la fe para aprender más sobre cómo recibir el Espíritu Santo.
- 10 Si es posible, intenta leer el Evangelio de Juan. Es un gran libro bíblico para acompañar durante este viaje, ya que tiene 21 capítulos y puedes meditar en cada uno de ellos durante un día.
