Los mandamientos nos permiten conocer la voluntad de Dios y, con sus instrucciones, nuestros ojos logran percatarse del mal. Si pecamos, seremos reprendidos, y entonces nos adecuaremos a su Disciplina, para así vivir en fe y obediencia.
Los mandamientos nos permiten conocer la voluntad de Dios y, con sus instrucciones, nuestros ojos logran percatarse del mal. Si pecamos, seremos reprendidos, y entonces nos adecuaremos a su Disciplina, para así vivir en fe y obediencia.