Dios de Israel, yo sé que tú buscas gente fiel. Tú los heriste, mas no les dolió; tú los consumiste, mas ellos rehusaron recibir disciplina. Endurecieron sus rostros más que la roca, rehusaron arrepentirse.” Jeremías 5.3

Para Dios, lo más importante no es lo que usted hace, sino su obediencia y fidelidad hacia Su Palabra, creyendo y volviéndose humilde al aceptarla de todo corazón. Así, usted puede acercarse a Su Dulce Presencia.