Este domingo (12), quien estuvo en una Universal pudo participar de la Oración de la Concordancia de la Hoguera Santa directamente desde el río Jordán. El Obispo Edir Macedo, acompañado de obispos y esposas de diferentes partes del mundo, clamó a Dios por todos los que participaron en el propósito de fe. El evento fue transmitido en todas las iglesias de Universal durante las reuniones del día.
En la ocasión, el Obispo Macedo destacó la importancia del bautismo en las aguas como un hito de transformación espiritual. Explicó que el acto simboliza el “entierro” del viejo yo y el renacimiento como una nueva criatura ante Dios.
“El bautismo en las aguas significa sepultura. El difunto debe ser enterrado. Cuando el Señor Jesús fue bautizado en agua, Dios dijo desde el Cielo: ‘Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia’. Y el mismo Dios habla a los que descienden a los sepulcros de agua. Cuando se levantan, escuchan esta voz en su interior. Sólo la persona que verdaderamente se arrepintió se levanta de las aguas nacida de nuevo, como una nueva criatura. Entonces esta nueva criatura podrá oír la voz del Padre que dice: ‘Éste también es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia’”.
Los Obispos también sumergieron las peticiones de las personas, para “enterrarlas” simbólicamente en aguas bautismales como acto de confianza en la intervención divina.
“Es una cuestión de fe. Quien creyó y puso su nombre en los sobres, triunfará”, determinó el Obispo Macedo.
Al cerrar la ceremonia, el Obispo dirigió una ferviente oración, pidiendo a Dios que cumpla las peticiones y confirme las bendiciones sobre la vida de todos los que participaron.
“Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Hágase tu voluntad en la vida de todos los que escribieron sus nombres en los sobres, de todos los países. Tú conoces a cada uno de ellos y, cuando sean sepultados, dondequiera que estén, el Espíritu del Señor descenderá allí para confirmar lo aquí dicho”, concluyó el Obispo.