NINGUNA RELACIÓN puede soportar mentiras. A veces, quien miente lo hace por miedo. El miedo es un gran generador de mentiras. La mentira no deja de ser una falla de carácter, pero el miedo es un agravante de la situación.

Por eso, para terminar con las mentiras, el compañero que miente necesita confrontar primero sus miedos para vencerlos. El problema es que muchas parejas no cultivan un ambiente en la relación en donde la verdad pueda fluir libremente. Además de eso, quien miente necesita aprender a ser honesto consigo mismo en primer lugar: reconocer a qué le teme.

La buena noticia es que eso puede ser vencido, con el debido apoyo, como el que las parejas reciben en nuestras charlas de la Terapia del Amor. Este Jueves a las 20 horas, en Av. 18 de Julio 2025 esq. Pablo de Maria.