El amor al prójimo es algo que puede tener varias interpretaciones, principalmente la parte que se refiere al “prójimo”. Por otra parte, no siempre el amor es verdadero, ya que esta palabra ha sido ampliamente desvirtuada de su esencia. Y una de las actitudes que la distorsionan es el interés.

Sin embargo, afortunadamente, algunos hacen que las cosas sucedan de verdad y rescatan la legitimidad de las buenas actitudes. Es el caso del actor norteamericano Chris Salvatore, de 31 años, residente de Los Ángeles, Estados Unidos. Él se convirtió en un gran amigo para su vecina Norma Cook a lo largo de los últimos cuatro años. El año pasado comprobó la veracidad de su comportamiento. A Norma le diagnosticaron leucemia y pasó meses en el hospital luchando contra la enfermedad y sus efectos colaterales, como la debilidad de su sistema inmunológico. Batalló contra una neumonía y problemas de respiración.

Los médicos fueron claros: Norma necesitaba atención las 24 horas. Sin familia, todo empeoraba aún más por el hecho de que ella no podía pagar enfermeros particulares. Fue entonces que Chris probó realmente que lo que había entre ellos era amistad verdadera y no solo “les gustaba estar juntos” -sí, incluso para quien no sabe, eso no quiere decir exactamente ser amigo. El actor simplemente la invitó a mudarse con él. “La única otra opción era que fuera a un asilo. No podía hacerle eso a alguien que es como mi propia abuela”, reveló el actor al diario Today.

Chris necesitaba el dinero para mantener a Norma y acudió a Internet para ayudarla y recaudó más de 50.000 dólares a través de GoFundMe, un sitio norteamericano para causas solidarias. Él mismo cuida a su amiga mientras está en la casa y, cuando tiene que trabajar, le paga a una enfermera. Le cocina siempre que puede. Ellos conversan bastante todo el tiempo, miran la televisión juntos y tienen otros pasatiempos.

Norma y Chris saben que a ella le queda poco tiempo de vida. Por eso se pusieron de acuerdo en que si sobra dinero de lo recaudado, cuando ella ya no esté, será donado a las personas que están en la misma condición en la que ella estaba.

La convivencia con el amigo y ahora compañero de departamento le ha dado sentido a los días de Norma -y dignidad, sin lugar a dudas. Ahora, la pregunta es: ¿usted ama de verdad a su prójimo o es un sentimiento que no pasa del viejo juego de intereses que impregna a la humanidad? ¿Tendría la disposición que Chris tuvo para ayudarla?