En una época en la que las autobiografías y los libros de autoayuda ocupan las estanterías y marcan la curiosidad y las emociones de muchos, la Biblia continúa siendo incomparablemente la única capaz de transformar vidas y compartir la mente del Creador con cada persona
Ante una generación carente por el streaming, la música y un alud de informaciones, novedades y entretenimientos, las estanterías se llenan de libros de autoayuda con sellos de best sellers y de autobiografías que se vuelven ejemplos a seguir. De esta manera, historias –basadas en hechos reales o no– surgen en tapas y sinopsis que atraen multitudes ávidas por cada nuevo volumen. Leer es indiscutiblemente agradable. Muchas personas tienen ese hábito por hobby, pero también hay quienes buscan, en la lectura, palabras de alguien que describa un poco de sí mismo y así, tal vez, encontrar algo de bienestar. Sin embargo, si nada es lo suficientemente capaz de hacerlo, recuerde que la Biblia sí lo es.
Mientras que las literaturas comunes reúnen las ideas de quien las crea, la Biblia comparte el diálogo que, aun hoy, Dios espera mantener con nosotros.
Durante un viaje misionero, el obispo Edir Macedo, quien recientemente publicó una nueva versión de la Biblia con sus propios comentarios y anotaciones de fe, hace una reflexión importante: muchas historias de amor conducen a sus lectores a las lágrimas, ya que «bebieron, comieron y tragaron el espíritu del autor de esos libros, pero, cuando usted lee la Biblia, bebe del Espíritu de la Biblia, que es el Espíritu Santo», continuó.
El origen de la Tierra explicado de un modo que hasta hoy es un enigma para los científicos, los dilemas y los conflictos personales atorados dentro de cada uno desde el comienzo del mundo, la humanidad que surgió mediante el pecado, la codicia, la envidia, los celos, la rabia y todos los sentimientos a los que nos enfrentamos, las consecuencias implícitas en cada decisión y el dolor expuesto de un Padre que lidia con la ingratitud y con la indiferencia, todo esto se puede leer a lo largo de la Palabra de Dios. La Biblia es un manual que nos sorprende por la magnitud y la complejidad de los milagros y, a veces, nos expone ante la calidad de una fe sólida y sobrenatural. Además, nos muestra los secretos para formar una familia feliz, lograr un matrimonio pleno y duradero, como también alcanzar una vida próspera en todo sentido, comenzando por el ámbito espiritual. Creer o no en esta Palabra es decisión de cada uno, lo que no invalida en absoluto ni una coma. No existe un libro que pueda compararse con las Sagradas Escrituras, que nos ampare espiritualmente y nos mantenga en pie.
Un poco más sobre ella
Escrita hace miles de años, la Palabra de Dios está viva, es eficaz (Hebreos 4.12) y repercute en el interior de quien la desea para sí. Con más de 3,9 mil millones de ejemplares, se convirtió en la obra más leída en el mundo, aunque es mucho más que referencias, historias o números. Encontramos en ella respuestas a todas las cuestiones, desde las más cotidianas hasta las más íntimas. Entonces, ¿por qué no acercarse y conocer más sobre ella? Descubra, leyendo las informaciones al margen, cómo disfrutar de las Palabras del Altísimo y conozca algunos detalles que la hacen realmente única.