En este “Día Internacional de la Mujer”, una reflexión para que te entiendas y aprendas a valorarte

    Hoy, 8 de marzo, se celebra el “Día Internacional de la Mujer”, fecha en la que, en todo el mundo, la mujer es honrada, exaltada y su valor reconocido por la sociedad. Lo cual es muy justo.

    Sin embargo, aunque todo esto es muy bonito, por desgracia, en la práctica -y en general-, la realidad de muchos de ellos está por debajo de esa aparente apreciación tan explícita ese día y que, sinceramente, no supone la menor diferencia en su día a día. . Lo que realmente marca la diferencia es sentirse amado y valorado todos los días del año.

    Lo paradójico es que, para que esto suceda, depende mucho más de ellos mismos, de cómo se posicionan en sus relaciones, ya sean sociales, afectivas o profesionales, que de cualquier otra persona. De ahí la importancia de que comprenda y reconozca su valor, independientemente de los factores externos, porque cuando conoce su valor, nunca permitirá que otros la disminuyan o la desvaloricen.

    Valorarte a ti misma es algo profundo y espiritual

    Para Cristiane Cardoso, la mujer sabe incluso que necesita valorarse, que tiene que quererse, cuidarse, sin embargo, aunque quiera hacer eso, no puede. “Tiene dificultad para valorarse a sí misma en la práctica. Entonces ves que es una cosa espiritual, porque ¿De qué sirve saber y no poder hacerlo? ¡Hay una distancia muy grande!”, enfatiza.

    Cristiane también destaca que todas estas fechas conmemorativas, Día de la Madre, Día Internacional de la Mujer, le sienta bien, le gusta, pero la verdad es que no son capaces de darle a las mujeres lo que realmente necesitan. Bueno, la autoestima es algo más profundo y más espiritual.

    “Necesito valorarme. De nada me sirve saber que mi padre me valora, que mi hijo me valora, ¡tengo que valorarme! Y eso es algo que solo Dios puede hacer. Es una conciencia del Espíritu Santo dentro de nosotras. Puedo hablar, hablar y usted continuar sin saber valorarse, porque no aprendes eso; Es algo que viene de Dios, ¡Dios te lo da!”, señaló. Y si tiene dudas sobre su valor ante Dios, mire al Señor Jesús y vea cuánto valoraba a las mujeres y cuántas vieron transformadas sus vidas durante Su ministerio aquí en la Tierra. Como la mujer sirofenicia (Mateo 15:27,28); la mujer hemorrágica (Marcos 5:27,28); la mujer samaritana (Juan 4:16); la mujer adúltera (Juan 8:11) y tantas otras.

    Jesús hizo cuestión de honrar a la mujer

    Ni hablar de María Magdalena, de quien expulsó 7 demonios y que más tarde se convirtió en fiel seguidora y en la primera persona que vio al Señor Jesús después de su resurrección. Sí, fue a ella, una mujer y ex prostituta, a quien el Señor Jesús se le apareció primero… Pudo haber sido a uno de los once discípulos, pero no, Él se encargó de darle ese honor a una mujer. ¿Te parece poco?

    Entonces, si tiene problemas para ver su valor, pídale al Espíritu Santo que revele esa conciencia dentro de usted. Además, desarrollar una relación íntima y sincera con Dios.

    Entonces, si tiene problemas para ver su valor, pídale al Espíritu Santo que revele esa conciencia dentro de usted. Además, desarrollar una relación íntima y sincera con Dios.

    Papel esencial en la familia.

    Además, la mujer tiene un papel esencial dentro de la familia, constituida por el propio Dios. Ella tiene la importante función de edificar su casa (Proverbios 14.1), así como en varios pasajes bíblicos el Señor Jesús enfatizó su valor, como Rahab, quien a través de su actitud de fe logró salvar de la destrucción a toda su familia (Josué 2:1-22; 6:17-25).

    Incluso esta semana, en toda la Universal, se está llevando a cabo la mayor campaña de salvación familiar, y este 13/03 se llevará a cabo el Domingo de la Salvación de la Familia, 09:30H en nuestra Catedral de la Fe y en todas las Universal del país.

    Lleve algo que represente a la persona por la que está intercediendo. Puede ser una prenda de ropa, una fotografía o un nombre escrito en un papel. En la ocasión, los pastores, con todos los que estén allí presentes intercederán a Dios por las familias.