Practicar el perdón es fundamental para lograr una vida de paz y armonía, sin embargo, para muchas personas perdonar a quienes los han herido no algo  impracticable, pues creen que hacerlo es lo mismo que limpiarlos de culpa.

Pero la verdad es que cuando perdonamos no estamos haciendo el bien a quienes nos hacen daño, sino a nosotros mismos.

Por eso, el 21 de abril será el Día del Perdón en todas las Iglesias Universal.

Consecuencias del rencor:

Muchos problemas de salud son consecuencia de un rencor, de un problema emocional, por eso dan medicamentos para tratar el cuerpo, pero no pueden tratar el corazón.

  • Cuando una persona es curada en el alma, a menudo también es curada en el cuerpo. Por eso Jesús, cuando sanaba a los enfermos, en algunos casos, primero perdonaba a la persona. Él decía: “tus pecados te son perdonados” y solo entonces realizaba la cura. Es decir, curaba a la persona de la enfermedad del pecado y luego la curaba físicamente.
  • El rencor es como bolas de hierro diez veces más pesadas encadenadas a tus tobillos. No podrás salir del lugar, pero cuando cortes estas cadenas del mal, entonces tu vida despegará.

Prepárese:

Entonces usted que quiere recibir el perdón de Dios, límpiese del rencor, pida perdón a alguien, aunque sea lo más difícil de su vida; tú que necesitas liberarte de la culpa por algo que hiciste y no te has perdonado hasta hoy, que tienes un orgullo que no te deja perdonar, o usted que guarda en su interior un sentimiento de venganza, prepárese para este 21 de abril, el Día del Perdón.