…Para esto Yo He Nacido y para esto He Venido al mundo, para Dar testimonio de la verdad. Todo el que es de la verdad escucha Mi Voz. Juan 18:37 LBLA
El que quiera seguir a Jesús y Servirlo, debe seguir y vivir en la verdad. La persona, para que reciba el Espíritu Santo debe estar vestida de la Verdad, porque Él es el Espíritu de la Verdad. Es imposible recibir Su Espíritu andando en la mentira.
He aquí, no Se ha acortado la mano del Señor para salvar; ni Se ha endurecido Su oído para oír. Isaías 59:1 LBLA
La Mano de Dios no Se ha acortado, ella sigue extendida. Pero si Su mano no Se ha acortado, ¿por qué hay personas que no están venciendo?
La respuesta está en el próximo versículo:
Pero vuestras iniquidades han hecho separación entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados Le han hecho esconder Su rostro de vosotros para no escucharos. Isaías 59:2 LBLA
Vea que lo que hace separación entre las personas y Dios son las iniquidades y los pecados.
Iniquidad es un pecado consiente. Es aquello que sabe que está mal y aun así lo hace.
Dios no Desea estar Separado de las personas, pero son muchas que se separan de Él por sus iniquidades.
Porque vuestras manos están manchadas de sangre, y vuestros dedos de iniquidad; vuestros labios hablan mentira, vuestra lengua murmura maldad. Isaías 59:3 LBLA
Manos manchadas de sangre: representa las almas que se están perdiendo por el mal testimonio de aquellos que dicen «conocer la Palabra», pero no La siguen por causa de sus iniquidades.
Nosotros siempre estaremos en el medio, de un lado Dios, del otro el diablo. No hay como servir a dos señores, se pasará la eternidad con aquel que tomamos la decisión de servir, sea al Señor de la Verdad o el señor de la mentira.
No hay quien clame con justicia ni quien abogue con honestidad. Confían en la confusión, y hablan falsedades; conciben malicia, y dan a luz iniquidad. Isaías 59:4 LBLA
Quien está vestido de la Verdad vive lejos de la confusión, falsedad, malicia, porque son iniquidades que les aparta de Dios.
Un tipo de iniquidad es hacer las cosas para Dios relajadamente, murmurando o de cualquier manera.
Entienda que Dios no Obliga a nadie a SEVIRLO, a HACER o a DAR. Pero a partir del momento que uno quiere SERVIR, HACER o DAR, debe ser hecho lo mejor, no es apenas SERVIR, es SERVIR con toda la fuerza, es lo mismo a la hora de HACER y al DAR.
Haciendo las cosas para Dios de cualquier manera, el perjudicado es uno mismo:
Y cuando extendáis vuestras manos, esconderé mis ojos de vosotros; sí, aunque multipliquéis las oraciones, no Escucharé. Vuestras manos están llenas de sangre. Isaías 1:15 LBLA
Pero Dios muestra el Camino de reconciliación:
Lavaos, limpiaos, quitad la maldad de vuestras obras de delante de Mis ojos; cesad de hacer el mal Isaías 1:16 LBLA
Lavaos: es limpiar el interior, sacar aquel odio, rencor, malicia, que está ensuciando el corazón, y a su vez, apartando de Dios.
Cesar de hacer el mal: es dejar lo equivocado por lo correcto. Es dar un punto y aparte para la vida antigua, comenzando una nueva etapa, priorizando la Verdad, priorizando la Salvación del Alma.
Vea que desde el Principio, Dios siempre Quiso estar cerca del ser humano, a ejemplo de la época del Jardín del Edén, la construcción del Tabernáculo y luego la Edificación del Templo, en la época de Salomón, y la muerte y Resurrección del Señor Jesús; todo para que haya comunión entre el Creador y la criatura. A pesar de todo eso la humanidad insiste en quedar lejos del Creador.
Infelizmente muchas almas están siendo destinadas al infierno, no porque Dios las está condenando, sino por las actividades que esas almas están tomando.
Aproveche la oportunidad, reflexione, aun hay tiempo de tomar la desición de hacer la Voluntad de Dios y remover la iniquidad. Aproveche, antes de que sea demasiado tarde.
Piense en eso.