Las señales de que el mundo vive sus momentos finales están por todos lados y de varias formas, lo que comprueba que la Biblia no es un mero libro de historias y que el tiempo para buscar a Dios se está agotando. “Pues sabemos que la creación entera a una gime y sufre dolores de parto hasta ahora.” Romanos 8:22 La naturaleza también ha sido el megáfono de Dios para llamar la atención del ser humano, conforme a lo que está registrado bíblicamente. El cielo, la tierra y las aguas han usado una forma descomunal para sacudir al ser humano y revelarle una innegable verdad mientras grita: “Estamos cerca del fin” El paralelo entre los hechos mundiales y las profecías apocalípticas se ha estrechado a tal punto que no deja duda, ya estamos viviendo el inicio del apocalipsis. Dios ha alertado al ser humano desde el Jardín del Edén. Nadie podrá dar excusas por falta de aviso. Pero el tiempo de la salvación se está agotando. Mire a su alrededor. Vea lo que sucedió con el mundo en los últimos dos años, meses, semanas y días. Las señales descritas en el Libro Sagrado hace siglos se están cumpliendo en todos los lugares. (Vea Mateo 24:2-12)

Llegamos al principio de dolores

Quien presta atención a los detalles de la Palabra de Dios sabe que esa es más que una evidente señal de que estamos viviendo el principio de dolores. El desamor choca, las guerras y sus rumores son cada vez más constantes, el hambre ya no es saciada y las enfermedades ahora surgen con el nombre de “nueva variante”, el odio a los verdaderos cristianos y a la Verdad se ha intensificado y las catástrofes naturales son cada vez más frecuentes. El avance tecnológico ofrece al ser humano todo el conocimiento en la palma de su mano y es capaz de crear desde memes para las redes sociales, hasta bombas devastadoras para la guerra. El escenario está siendo preparado de una manera que no habrá escapatoria para nadie.

¿ESTO LE ASUSTA? ¡CUIDADO!

En medio a tanto caos, ¿quiere escuchar una buena noticia? No precisamos estar aquí para presenciar lo peor. Estamos siendo alertados no apenas de que el fin está cerca, pero sino de que nuestra alma puede ser salva. Cuando hay certeza de la salvación de ella, no hay miedo ni somos tomados desprevenidos. Las personas están distraídas espiritualmente y no perciben las señales de la venida de Jesús. Si ellas no despiertan, van a ser tomadas de sorpresa y quedarán. Creemos que la Iglesia (los verdaderos cristianos) no pasará por la gran aflicción que vendrá sobre el mundo próximamente. Ya que sucederá el evento conocido como el “arrebatamiento”. ¿Usted está preparado? Si lo está, persevere hasta el último instante. En caso de no estarlo, arrepiéntase de sus pecados y persevere hasta el fin. Tan cierto como Él resucitó, aquellos que crean, serán lavados de sus pecados en la Sangre de Jesús, y por esperar en Él la Salvación, resucitarán también en Su venida.

Medite en las Sagradas Escrituras y participe los días miércoles en la Universal más cercana a su casa. ¡Invierta en su salvación!